El jueves por la tarde se produjo un incendio en la cumbre climática COP30 en Belém, Brasil, lo que obligó a una evacuación caótica del centro de convenciones. El incendio, que se originó en un pabellón dedicado a África, hizo que los delegados buscaran seguridad mientras el humo llenaba las instalaciones construidas en un antiguo aeródromo.
Caos inicial y evacuación
El incendio comenzó poco después de las 14.00 horas. hora local, y testigos informaron que llamas atravesaban el techo del pabellón. Los delegados, incluidos diplomáticos, periodistas y activistas de casi 200 países, inicialmente recibieron poca orientación oficial mientras huían del lugar. Una asistente, Ana Silva, describió el pánico: “La gente empezó a correr junto a nosotros… Entonces un tipo empezó a gritar ‘fuego, fuego’ en inglés y portugués”.
Contención y perturbaciones
Los funcionarios de la cumbre afirmaron que el incendio fue contenido en aproximadamente 30 minutos, aunque los delegados fueron evacuados repetidamente y se les prohibió regresar a las negociaciones durante varias horas. La presidencia de la COP afirmó más tarde que el incendio se había extinguido con “daños limitados”, pero los trabajos se suspendieron hasta el jueves por la noche. Las Naciones Unidas confirmaron que 13 personas fueron tratadas por inhalación de humo.
Cumbre bajo tensión
El incidente ocurrió en medio de condiciones ya tensas en el lugar de la cumbre. Los delegados se habían quejado anteriormente de techos con goteras, escasez de alimentos y aire acondicionado inadecuado en el húmedo calor brasileño. El jefe climático de la ONU, Simon Stiell, había pedido recientemente una mayor seguridad luego de una irrupción en una protesta a principios de semana, citando puertas no aseguradas y equipos defectuosos como preocupaciones de seguridad en una carta a funcionarios brasileños.
El incendio plantea dudas sobre la preparación de la infraestructura temporal de la cumbre y los desafíos logísticos de albergar un evento internacional a gran escala en un lugar vulnerable. La cumbre es fundamental para que las naciones acuerden reducciones de emisiones en medio de la aceleración del cambio climático.
El incendio fue contenido rápidamente, pero subrayó la inestabilidad que rodea a las negociaciones. Es probable que el incidente aumente la presión sobre los funcionarios anfitriones para que resuelvan los problemas actuales y garanticen la seguridad de todos los participantes.